Van Helsing y Drácula, las caras del bien y del mal

Con base en la novela de Bram Stoker “Drácula”, en 2004 Stephen Sommers adapta al cine el personaje de Van Helsing, (de apellido holandés), el cazador de vampiros y otros monstruos.

No es esta ni mucho menos la única traslación al cine del asesino de vampiros y de su víctima, Drácula, inspirado en el siniestro príncipe rumano Vlad III, apodado Tepes o El empalador. De hecho Drácula ha sido inmortalizado muchísimas veces en la gran pantalla, siendo quizá la película de 1992 “Drácula, de Bram Stoker” la versión más fiel a la novela original


Pero este Van Helsing de Sommers tiene algunas cosas propias. Se llama Gabriel y no Abraham, como en la novela de Stoker. Y no sólo se enfrenta al conde Drácula, sino también a otros monstruos como el Doctor Jekyll y Mr. Hyde, a hombres lobos, a la criatura del Dr. Frankenstein, a Igor, a 3 bellas y malvadas novias de Drácula y a un sinfín de criaturas malignas, hijas del malvado Conde.


Se puede decir que en la lucha entre el bien y el mal, Van Helsing representa al arcángel Gabriel, mientras que Drácula es el hijo del Diablo.


No obstante, en esta película, Drácula (Richard Roxburgh) es hijo de Valerious el Viejo, muerto en el siglo XV por la mano izquierda de Dios, o sea el mismo Gabriel van Helsing de joven.


El personaje de Drácula parece estar inspirado en Vlad Draculea Tepes (1431-1476), que murió a los 45 años de edad. Residió en Transilvania, en el castillo de Bran, una fortaleza medieval localizada en la actual Rumania, que goza de gran atractivo turístico por la creencia popular de que era la antigua residencia de Vlad Țepeș el Empalador.

El poder de la acción y los efectos especiales

Si bien la película no es muy sorprendente, sí es muy entretenida y sus dos horas y seis minutos de duración se pasan bastante rápido. Realmente te metes en el mundo de los vampiros, esos seres de cuya “existencia” hemos oído hablar tantas veces y tantas veces hemos visto en series de Tv, películas, libros, cómics, etc.


En mi opinión, esta versión de Van Helsing tiene aspectos muy positivos que se concentran en su dinamismo y acción trepidante y en unos efectos especiales espectaculares. Así, por ejemplo, las transformaciones de las vampiresas o de los hombres lobos, o el cruce de la puerta que une al castillo de Drácula, el mismo monstruo de Frankenstein o el Dr. Jekyll son dignos de mención


Me llama la atención el inmenso número de armas o herramientas que Van Helsing utiliza para enfrentarse a Drácula y la gran cantidad de ocasiones en los que nuestros héroes (Gabriel y Ana) se encuentran, digamos, flotando en el aire, es decir, cayendo al vacío, volando, agarrados en cuerdas e instrumentos varios y situaciones por el estilo. De las que afortunadamente para la humanidad siempre salen victoriosos


Lejos del terror clásico, Van Helsing tiene más puntos de conexión con películas de acción, aunque haya guiños a films como Alien, con los huevos de las crías de Drácula y sus novias


Y en cuanto a acción, hay que decir que Van Helsing es una buena película, diseñada para pasar un buen rato.


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